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Noticia
FINAL FOUR
Giraldillo histórico.
El equipo verderón revalida el título de campeón de la F7Sevilla Cup y se convierte por méritos propios en el "Rey de Copas". Despistaos FC cae con honor en una final decidida en los penaltis.
Primer Domingo del mes de junio y el último de competición, acaba la temporada 2018/19 con la esperada "Final Four" de la F7Sevilla Cup. Cuatro equipos han exprimido al máximo su calendario, han logrado llegar hasta el final y, alguno de ellos, lleva más de 21 partidos a sus espaldas este curso. Llegan en momentos distintos, con objetivos dispares y con sensaciones diferentes pero todos coinciden en algo, quieren ser campeones.

Celta de Jigo, metido en todas las batallas, ansioso por rubricar las buenas sensaciones que dejan en cada torneo y que aún no logran traducir en vil metal. En frente, la teórica cenicienta de esta final, un equipo de Cuarta División, pero no uno cualquiera, es el campeón, es Despistaos FC. Ellos ya han tocado plata, o mejor dicho, oro. Su dinámica es positiva y vienen de golear a Los del Poli y AZ Viapol, la presión para ellos es igual a cero. Y empieza el partido con gol visitante, calma tensa, queda mucho pero las sorpresas son tan típicas en este torneo que ya se barrunta que los amarillos pueden ser finalista. Empata el Celta, cambia todo, los tapados no lo son tanto y al final, un año más, el Celta puede estar en otra final. Se cae todo, llega el gol que pone de nuevo por delante a los visitantes, pasan los minutos y Despistaos es cada vez más finalista, jugada fatídica, no queda nada, los amarillos rematan la faena y llegan a su primera final copera (1-3).

En el mismo sitio y a la misma hora, el escenario es parecido, Atlético Giraldillo, equipo curtido en mil batallas, se asoma con la ilusión y la presión de revalidar el título que actualmente ostenta. La defensa del campeonato tiene que resistir un primer envite llamado KNZ, tres siglas que resumen a un equipo cargado de juventud, calidad e ilusión, son los otros tapados de la Final Four y, al igual que Despistaos, ya han tocado metal en la presente campaña. La veteranía de hombres como Pablo, en los locales, y el descaro de otros como Charly, en los visitantes, resumen a la perfección lo que es este partido, un choque entre generaciones, la experiencia contra la osadía. El paso de los minutos rompe provisionalmente un empate que volverá a ser instaurado, todo se decide en la tanda de penaltis y ahí, aunque la suerte manda, la veteranía es un grado. El Giraldillo volverá a estar en la final.

Llega el partido decisivo por el título, un duelo inédito, interesante de ver. Gradas ambientadas con amigos, compañeros y jugadores de diferentes equipos que no han querido perderse este último suspiro de la competición. Salen los equipos, pita el colegiado, arranca una nueva final. Cuatro minutos pasan hasta que Pedro, de tacón, vuelve a poner en pie a la grada amarilla, Despistaos FC revive las sensaciones de la semifinal, esas que permiten intuir que todo irá bien. Pasan los minutos, la impotencia visitante es patente tras dos ocasiones falladas, llega Jaime y pone el empate, las cosas van a cambiar a partir de ahora. El partido se torna verde antes del descanso, mucho sufrimiento. Los amarillos dan un zarpazo tras la reanudación, salva Víctor bajo palos, el Atlético Giraldillo se rehace, llega el segundo... zambombazo imparable. Ahora sí, ya se intuye al campeón... o no. A dos minutos del final llega el empate, la pelota entra llorando anticipando el drama que se avecina... la tanda de penaltis. Lanzamientos de siete metros que erigen a los guardametas como héroes en sus escuadras, lo paran todo hasta llegar a una muerte súbita en la que Javi González sentencia con un disparo que lleva al Giraldillo a lograr su segundo título copero consecutivo.